Los ecologistas rechazan las propuestas de regulación del Oja presentadas por el Gobierno de La Rioja
La entidad manifiesta su más enérgico rechazo a la solución adoptada por los redactores del estudio, la construcción de un embalse de regulación en el valle de Urdanta, así como a las otras dos alternativas planteadas: un embalse en Cilbarrena, con aportación mediante un canal de agua desde el valle de Urdanta; y otro embalse en Posadas.
Los redactores del estudio justifican la construcción de un embalse de regulación en la cabecera del Oja, a pesar de sus fuertes afecciones ambientales, por la carencia de una regulación efectiva en la cabecera de la cuenca del Oja y para garantizar el suministro de agua de boca a los municipios del Oja-Tirón.
Hace años se ejecutó el «Proyecto de abastecimiento de agua a diversos municipios del Sistema Oja-Tirón, que consistía en la utilización de dos pozos existentes y la perforación de un tercero, para la captación de agua, bombeada e impulsada hacia una estación de tratamiento de agua potable y un depósito de regulación, todo ello en el municipio de Ezcaray, y una extensa red ramificada formada por una conducción principal, Ezcaray – Haro, de la que partían los distintos ramales para abastecer a la totalidad de los municipios del sistema. Dicha actuación fue presupuestada en 25,7 millones de euros.
A finales de 2012, ejecutado el proyecto, a falta del tercer pozo a perforar y con el segundo al parecer con deficiencias, comenzaron los bombeos en el primer pozo (San Torcuato), afectando al cauce del Oja y sin poder alcanzar los caudales previstos.
En lugar de exigir las responsabilidades civiles correspondientes, ejecutar las actuaciones pendientes y proseguir con ensayos de bombeo para subsanar las deficiencias de la actuación, haciéndola operativa, el Gobierno de La Rioja encargó el estudio que se somete ahora a Información Pública para justificar una decisión ya tomada: la construcción de una presa en el Valle de Urdanta, partiendo de unas necesidades de agua de boca sobrevaloradas y planteando, como únicas alternativas a la presa de Urdanta, otras presas en la cabecera del Oja.
Ecologistas en Acción de La Rioja la considera injustificada porque hay otras alternativas viables, tanto desde el punto de vista económico, como social y ambiental:
La primera es reducir el consumo de agua de boca en los municipios con problemas de abastecimiento, separando dos redes, una de agua de boca para la población, y otra de agua para usos industriales, limpieza viaria, riego de parques y jardines, etc., como ya hace en algunos sectores el municipio de Logroño, captada del acuífero aluvial del Oja con altos contenidos en nitratos.
La segunda es utilizar, para el suministro de agua de boca de los municipios del sistema, las aguas subterráneas del acuífero calizo Pradoluengo – Anguiano en periodos de estiaje, y las aguas del aluvial del Oja captadas encima de Ezcaray en periodos de circulación abundante, tal como contemplaba el proyecto de abastecimiento, corrigiendo sus deficiencias.
La tercera, suponiendo que con la anterior no se cubriesen las necesidades, sería la construcción de un pequeño muro, bien en el Oja, aguas arriba de Ezcaray, o el río Urdanta, y una conducción hasta un depósito – pequeño embalse a construir en el tramo medio del valle del Oja, para llenarlo en invierno – primavera y utilizarlo en los meses de estiaje, con una segunda Estación de Tratamiento de Agua Potable conectada a la red de distribución.