CSIF denuncia «agresiones físicas y verbales al personal sanitario del consultorio de Ausejo»
Un grupo de personas han irrumpido de madrugada en dicho centro sin respetar las normas de seguridad sanitaria, profiriendo insultos y puñetazos al enfermero y médico que han tenido que recurrir a la Guardia Civil para evitar males mayores. CSIF relaciona estos hechos con el abandono de la Atención Primaria y la poca eficacia de las escasas medidas de seguridad de los centros sanitarios
La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) denuncia y lamenta una nueva agresión sufrida esta madrugada por el personal sanitario del consultorio médico de Ausejo, mientras atendían a una ciudadana portuguesa de 14 años que se sentía afectada por un dolor abdominal. Varias personas que acompañaban a la paciente han insultado, empujado y golpeado, primero al enfermero y después al médico que ha salido de su consulta para intentar poner fin a dichas agresiones.
Los hechos se han producido a las dos de la madrugada de este miércoles, cuando sin contacto previo con el servicio de urgencias 112, se han personado en la puerta del Punto de Atención Continuada de Ausejo la paciente y dos mujeres mayores de edad, una de las cuales se dirigía a ella con términos que hacen suponer que se trataba de su madre.
En esos momentos, en dicho establecimiento se hallaban un médico y un enfermero de guardia, quienes han facilitado el acceso al centro a estas personas y se han interesado por la patología de la menor que estaba muy alarmada y llorosa, con lamentos y profundos sollozos, lo que dificultaba la comunicación con ella, además de expresarse con poca soltura en español.
También han informado a los mayores que no debían tocar el timbre con esa premura y que dada la situación epidemiológica que estamos viviendo, lo correcto es contactar con el centro coordinador 112 y si el médico les deriva al Centro Sanitario, venir provistos de mascarillas o pedirlas en el mismo centro antes de entrar.
Cuando han comenzado a explorar a la paciente, se han producido nuevas llamadas al timbre y golpes en la puerta y una de las mujeres les ha facilitado la entrada a varios varones. Uno de los cuales que luego se identificó como el padre de la menor entró profiriendo insultos y amenazas. En ese momento el enfermero salió hacia la sala de espera para intentar impedirles el paso al recinto e indicarles que no podía haber tan gran concentración de personas en el interior y que era obligatorio el uso de la mascarilla, momento en el cual se produjo sobre su persona un ataque físico que intentaba echarlo al suelo y del cual se han derivado varias erosiones en la cara anterior del brazo izquierdo.
Alertado por el ruido, el médico salió de la consulta también hacia la sala de espera, lugar en el que fue insultado por el mismo individuo, empujado y luego golpeado en el pabellón auricular izquierdo. De dicha agresión no se han derivado heridas, pero sí la rotura de las gafas que llevaba puestas por caída de estas al suelo.
A pesar de lo sucedido. Estos profesionales continuaron la atención a la menor, como así lo reflejan los informes presentados en el sistema de Atención Primaria con las actuaciones realizadas y la impresión diagnóstica.
Posteriormente se personó en el establecimiento un grupo de guardias civiles que realizaron las oportunas diligencias y citando al personal sanitario en el Cuartel de Alcanadre para cursar la denuncia oportuna.
Esta Central Sindical pide a la Administración que actúe inmediatamente ante la gravedad de los incidentes denunciados, ya que dotar de seguridad las instalaciones ayudaría a evitar buena parte de las agresiones que se registran actualmente.
Asimismo, este sindicato exige al SERIS que actúe judicialmente y denuncie a los agresores, de forma que ejecute el plan de agresiones establecido, y que emita un comunicado público de repulsa del ataque.
Es terrible e intolerable que, una vez han finalizado los aplausos, se vuelvan a producir agresiones al personal sanitario que sigue arriesgando su salud frente al coronavirus y, ahora también, frente a los energúmenos de turno.
CSIF La Rioja relaciona estos lamentables hechos con el abandono de la Atención Primaria. Una situación que este sindicato que lleva denunciando desde hace mucho tiempo y que las buenas palabras e intenciones del SERIS todavía son incapaces de solucionar.
Es evidente que los actos institucionales y los alardes ante las cámaras y medios de comunicación no sirven para solucionar los graves problemas de los que adolece nuestra Atención Primaria, cuyos profesionales han sido y siguen siendo decisivos frente a la lucha de la pandemia del Covid-19.
CSIF sigue exigiendo que de verdad, y de una vez por todas, la Administración cuide de quien nos cuida. En este mismo sentido, CSIF recuerda que, como hace siempre, pone a disposición de cualquier profesional que sufra algún tipo de agresión, apoyo psicológico y jurídico, a través de su gabinete de CSIF-Ayuda.