La Federación de Enseñanza de CCOO de La Rioja exige al Gobierno y a la Consejería de Educación, «un plan de emergencia ante la propagación del Coronavirus y a la alerta de frío provocada por la borrasca Filomena, y aboga por retrasar la vueltas a las clases.

CCOO reitera que se debe garantizar la salud y el bienestar del alumnado y el profesorado, a través del cumplimiento de los protocolos de seguridad y el cumplimiento de la normativa de para afrontar las bajas temperaturas.

Hasta ahora las clases han funcionado con las ventanas abiertas. Con las temperaturas anunciadas esto ya no es una medida practicable. 

Este sindicato pide, ante la vuelta a las aulas el próximo lunes, que la Consejería de Educación suspenda el regreso a los centros educativos ya que no hay garantías de una vuelta segura.

Sin las medidas necesarias tanto para proteger de las bajas temperaturas como para frenar la propagación de la COVID en los centros, se pone en riesgo la seguridad y la salud de toda la comunidad educativa y de la sociedad riojana en su conjunto.

Ante la propagación del coronavirus, CCOO requiere al Gobierno regional que se realicen pruebas de coronavirus a todo el profesorado y alumnado para conocer la situación epidemilógica de la comunidad educativa.

Al igual que pide la instalación de medidores de CO2 o purificadores en todos los centros educativos para evitar así, la ventilación casi constante durante la jornada escolar.

CCOO siempre ha apostado por una presencialidad segura en las aulas y bien se ha demostrado que los centros educativos han sido lugares ejemplares gracias al esfuerzo de todos y todas pero, si no se puede garantizar una vuelta con todas las garantías de seguridad y salud, este sindicato pide que se suspendan las clases hasta entonces».