Nuevo pleno municipal y nueva movilización en la plaza de España para pedir la reapertura de las instalaciones deportivas cerradas desde el 28 de octubre. Esta vez, la protesta ha venido desde los trabajadores del Centro Deportivo AQUANAJERA que piden la reapertura de la instalación, «cerrada unilateralmente desde el pasado 28 de octubre por la empresa gestora (JIG, servicios integrales)». El cierre de forma unilateral, por parte de la empresa, se debe a la falta de acuerdo con el ayuntamiento, para asumir los costes energéticos de la instalación, ya que pide que sea el consistorio el que los asuma, y por su parte el ayuntamiento ha decidido no sacar una nueva licitación asumiendo los costes y prorrogar el contrato anterior ya que constaba de dos prórrogas firmadas por la empresa en las que los costes corrían a su cargo.

Los trabajadores de la instalación defienden que «aparte de ser su centro de trabajo, el centro da servicio diario a más de 1.200 usuarios que ven alterada su práctica deportiva, rehabilitaciones, etc».