El PP denuncia que el Ayuntamiento de Ezcaray atraviesa por una preocupante situación económica, «con múltiples facturas sin pagar»
El PP de Ezcaray alerta de la «preocupante situación económica por la que atraviesa el Ayuntamiento de la localidad, con múltiples facturas sin pagar y sin crédito consignado para ello, tal y como se descubrió durante el pleno municipal celebrado el día 22 de diciembre.
Un asunto muy grave porque hay proveedores que además de reclamar el abono de las facturas pendientes, están dejando de prestar los servicios, perjudicando así a todos los vecinos. Con gobiernos socialistas la historia se repite. Una vez más, tendrá que llegar un Gobierno Municipal del PP para saldar las deudas, gestionar de manera eficaz el Consistorio y garantizar los servicios que los ezcarayenses se merecen. Algo que no es nuevo, ya que ocurrió algo similar en 2011 cuando los concejales populares se encontraron una deuda de 3,7 millones de euros y más de 800 facturas impagadas por gobiernos socialistas.
En este sentido, el Grupo Municipal Popular ya advirtió durante la celebración del Pleno que servía para aprobar los Presupuestos Municipales para 2023, de las numerosas irregularidades contables que contienen las cuentas municipales para el próximo ejercicio. En un ejercicio de responsabilidad, ofreció al Equipo de Gobierno Municipal socialista la posibilidad de retirarlos, corregir las irregularidades y volverlos a presentar para su aprobación.
Una propuesta que fue apoyada por el Secretario Municipal, pero que el Alcalde descartó, obligando a votarlos pese a ser consciente de irregularidades tales como el hecho de que los ingresos de capital sean mayores que los gastos de capital, lo que implica que se está afrontando el gasto corriente del Ayuntamiento con subvenciones. Del mismo, faltan ajustes a la hora de calcular el cumplimiento de estabilidad presupuestaria, porque no se ha realizado la liquidación del ejercicio anterior.
Los concejales del Grupo Municipal Popular no votaron por el atropello que se estaba produciendo e incluso dos concejales del PSOE, entre ellos la edil de Hacienda, se abstuvieron en la votación de las cuentas municipales, siguiendo el criterio del Secretario Municipal. Los ediles del PP no votaron por la posibilidad de incurrir en un delito de prevaricación.
Finalmente, un Presupuesto muy pobre en inversión, apenas un 10% del total, y repleto de irregularidades salió adelante con cuatro votos a favor, el Alcalde y tres ediles socialistas, de un total de once miembros de la Corporación.
Durante el turno de ruegos y preguntas, el Alcalde socialista se negó a responder a las preguntas pendientes de los concejales de la oposición, que reclamaban los saldos de las cuentas municipales para que constaran en acta y los vecinos fueran conocedores de la situación financiera del Consistorio», concluyen.