OPINIÓN. En doscientas palabras (III)
Las temporadas de noticias perras son horribles, angustiosas, hasta quitarte el sueño y jirones desgarrados de la vida. Es aterrador un hijo en su esplendor de juventud insultante, marche eternamente calcinado por la desidia, inanición criminal de funcionarios e incapacidad torpe de políticos que les suda la polla. Me refiero a la tragedia de Murcia. Encargados de velar por nuestra seguridad, de los más débiles e inexpertos, optaron por la indiferencia mirándose que sé yo, o hurgándose la nariz.
Niños llenos de vida, con ganas de comerse el mundo muriendo por el nepotismo e inanición funcionarial, por falta de compromiso y control.
Los permisos a locales y antros para la fiesta, para el disfrute y diversión no se hace un seguimiento serio y rutinario, eso está mal.
En mi pueblo y el suyo, Haro, en cierto antro de jarana y parranda, en su fachada hay focos eléctricos sujetos con cinta aislante renegrida, de manera chapucera, sin seguridad y hasta provocador. Eso se ve a la luz. En el interior den rienda suelta a la imaginación. Alguien será el responsable, le dará igual otro posible drama. Existen amnistías depositando capas de tierra encima disimuladamente.
Vizconde del Moro