La Guardia Civil detiene en Zarratón a una persona por los delitos de resistencia, desobediencia, atentado a agentes de la autoridad y tráfico de drogas
Varón de 41 años, con amplio historial delictivo, sobre el que pesaban dos órdenes de búsqueda, detención y personación. Durante la actuación se encerró en los baños de un bar para intentar tirar por el inodoro la droga que portaba, llegando a oponer una fuerte resistencia a su arresto.
Efectivos de la Guardia Civil en La Rioja han procedido a la detención de un varón de 41 años, de nacionalidad española y residente en Vitoria (Álava), como presunto autor de los delitos de resistencia, desobediencia, atentado a agentes de la autoridad y contra la salud pública por tráfico de drogas.
El detenido es un viejo conocido de las fuerzas y cuerpos de seguridad, con un amplio historial delictivo que incluye una treintena de antecedentes por diversa tipología, tales como delitos contra el patrimonio, contra la libertad sexual y contra la salud pública. Sobre él pesaban dos órdenes de búsqueda, detención y personación, dictadas por los juzgados de Haro.
Los hechos ocurrieron en la localidad riojana de Zarratón durante uno de los dispositivos operativos diseñados para la prevención de la Seguridad Ciudadana. Agentes del Puesto de San Asensio detectaron la presencia de un hombre que estaba requisitoriado judicialmente y que en esos momentos se encontraba en el interior de un establecimiento hostelero de la localidad.
Fuerte resistencia a su detención
Tras ser informado de los motivos por los que se iba a proceder a su detención, el individuo se resistió a la misma, mostró una gran agresividad hacia los agentes e intentó huir del local. Al no tener escapatoria, accedió a los baños, donde fue interceptado y reducido mientras intentaba tirar por el inodoro 50 pastillas de anfetamina con el logotipo de Snapchat, pequeñas cantidades de speed y marihuana, así como diversos precursores para la adulteración y corte de sustancias estupefacientes que portaba en el interior de una riñonera.
Una vez en dependencias policiales, se procedió a la instrucción de las diligencias correspondientes y su puesta a disposición de la autoridad judicial.